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Se define como infertilidad a la búsqueda intencionada de un embarazo por un periodo de 12 meses sin lograr la concepción en pacientes menores de 35 años o en un periodo de 6 meses en pacientes mayores de 35 años. Se determina el periodo de un año ya que en este tiempo alrededor de 90% de las parejas que están buscando un embarazo deberían de haberlo logrado, por lo que es necesaria una evaluación en este punto para valorar los diferentes factores que pudieran estar impidiendo lograr un embarazo. En pacientes mayores de 35 años se inicia la valoración posterior a solo 6 meses, ya que a mayor edad es necesaria una pronta acción para mejorar al máximo las posibilidades de lograr un embarazo.
Existen gran variedad de causas de infertilidad y son muy variadas. En términos generales se considera que:
-20% de las causas provienen del hombre: dentro de las más frecuentes encontramos problemas ya sea con la cantidad o calidad de los espermatozoides.
-30% de la mujer: dentro de las causas más frecuentes encontramos las alteraciones en la ovulación, así como los trastornos hormonales.
-30% de la pareja en conjunto: esto suele suceder cuando tanto el hombre como la mujer tienen alteraciones que normalmente por si mismas no darían problemas de infertilidad, pero cuándo se suman no permiten que la pareja pueda lograr un embarazo.
-10 a 20% pueden catalogarse como de origen desconocido.
Afortunadamente existen numerosos tratamientos para lograr un embarazo. Dependiendo la valoración y el diagnóstico puntual de cada caso y cada pareja, existen gran cantidad de posibilidades. Los tratamientos se dividen principalmente en:
-Tratamientos de baja complejidad: Se conoce como tratamientos de baja complejidad a todos aquellos tratamientos en los que la unión de los gametos (óvulo y espermatozoide) suceden dentro del cuerpo humano. Dentro de estos tratamientos podemos encontrar algunos de los siguientes:
-Coito programado
-Estimulación ovárica controlada con seguimiento y coito programado
-Estimulación ovárica controlada con seguimiento e inseminación intrauterina
-Inseminación intrauterina e Inseminación intracervical
-Biopsia testicular con capacitación espermática in vitro e inseminación intrauterina
-Tratamientos de alta complejidad: corresponden a todos aquellos tratamientos en los cuales existe la unión de los gametos (óvulo y espermatozoide) ocurren fuera del organismo humano dentro.
-Fertilización in-vitro (FIV)
-Fertilización in-vitro con donación de óvulos
-Fertilización in-vitro con donación espermática
-ICSI (inyección intracitoplasmática de espermatozoide)
-Fertilización in-vitro o ICSI con diagnóstico pregestacional (PGD)
No existe como tal ninguna prueba que sea capaz de predecir de manera 100% confiable la capacidad de una persona para lograr un embarazo en el futuro. En la mujer tenemos diferentes opciones de pruebas para valorar la reserva ovárica. La reserva ovárica nos habla de la cantidad potencial de óvulos que una mujer aun tiene en sus ovarios. Esto nos ayuda a estimar la posibilidad de tener dificultad para lograr un embarazo. Algunas de las maneras más confiables para valorar la reserva ovárica son:
-Hormona Anti-Mülleriana (AMH)
-Recuento de Folículos Antrales (AFC)
De igual manera, para los hombres no existen estudios que sean capaces de predecir la posibilidad que tiene su semen de fertilizar un óvulo y lograr un embarazo. De momento el mejor método de estudio que se tiene para valorar el potencial de fertilidad en el varón es:
-Seminograma (para que sea confiable este debe de ser realizado por personal capacitado y entrenado en este ámbito de preferencia por embriólogos y embriólogas esto debido a que es un estudio que se realiza de manera manual y los resultados dependen mucho de la experiencia y entrenamiento de la persona que lo realiza.
Lo más recomendable con todas las pacientes que estén planeando buscar un embarazo es que acudan con su ginecólogo/a a consulta preconcepcional. Esto es muy importante ya que la medicina preventiva constituye el mejor método para prevenir y disminuir las complicaciones médicas. En esta consulta se pueden identificar además factores de riesgo que podrían condicionar a problemas de fertilidad para tratarse de manera oportuna. De igual manera pueden identificarse factores de riesgo que pudieran modificarse previo a buscar un embarazo para intentar prevenir complicaciones durante el mismo.
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